18.4.06

Reminiscencia

Salí esta noche a aprehender algunos recuerdos ajenos, a robármelos cual mercenario, a apresarlos en esta cajita que llaman memoria.
Regresé cabizbaja, somnolienta, taciturna... vacía.
Nadie en la ciudad sabe de tus ojos, no han besado aún los dobleces tu piel, ni han visto la división política de tus brazos envueltos en perdición. No se han postrado sobre tu regazo, ni te han deseado desde la lejana posición de una pared amarillenta. No recuerdan faroles sucios, fuentes vacías, caminatas de medianoche, ni secuestros express.
No encontré recuerdos para hacerlos míos, y caminé. Caminé el largo trecho del límite de mi ciudad hasta mi casa, caminé de la fascinación a la realidad. No encontré una mente ajena con algun resquicio de tu imagen,no encontré el blanco perfecto de mis asaltos.
Regresé a casa con el dolor de otro día sin resultados, puse candados en las puertas y sellé cada ventana. La hora de los ladrones se acerca y no quiero que nadie te arranque de mi memoria.
(¿O es que fui yo quién te arrancó de sus cabezas?)